Vamos a tener que ir buscándonos nuevas excusas para no ir a enternar a la piscina. El clásico y resultón "no tengo tiempo" no nos va a valer después de leer ésto. No se, habrá que decir que el perro, trás comerse la tarea de los niños, no satisfecho, siguió con el bañador, las gafas y el gorro de silicona...
Muchas gracias Raúl por meternos caña. ¡El año que viene todos al 100 mari!
No hay comentarios:
Publicar un comentario