Parece una pregunta tonta, ¿no?
que vamos a hacer; pues nadar. Si, si, nadar, pero afortunados como somos de
hacerlo en la seguridad de la piscina, donde no hay tiburones, trolebuses o
conductores chiflados que esquivar, y además, contando con un entrono
climatizado (más o menos) que nos invita a relajarnos y dejar volar la
imaginación, ¿qué más pensáis que podemos hacer durante tantas idas y venidas?
Muchos no nadadores suelen pensar
que la natación es muy aburrida y que los nadadores no nos damos cuenta porque
tanto cloro nos ha frito el cerebro. Nada más lejos de la realidad. Está claro
que el que se aburre es porque quiere. Según una encuesta que hemos conocido a
través de @iSwimWithIssues, a parte de nadar, no paramos de darle vueltas al
coco, y no sólo en los volteos.
Como podéis observar, según la encuesta aproximadamente el 6% del
tiempo que pasamos en el agua lo dedicamos a cantar. Que románticos. Y luego
nos llaman sosos. Ellos se lo pierden. Eso si, suponemos que será mentalmente
porque bastante tenemos con respirar para no ponernos azules y yo por lo menos
no me he cruzado nunca en la calle con ningún Frank Sinatra.
Otro 20% del tiempo nos
dedicaríamos a pensar en comida, ¿por que será? Ni que fuéramos pirañas…
Como en toda encuesta que se
precie, también aparecen los indecisos, un 30%. -¿Qué porras estoy haciendo
aquí? Con lo bien que estaría yo en el sofá…- Mirar el calendario también puede
ayudar; operación turrones, operación bikini, operación buenas intenciones para
el año nuevo… Conclusión: que buena gente somos; la piscina está llena de gente
bienintencionada.
Pero tanta actividad mental,
tiene sus consecuencias, lo que nos lleva al 40% del rosco. ¿Qué es lo que
hacemos la mayor parte del tiempo? Pues parece ser que perdernos. E intentar
encontrarnos. ¿Cuántos largos llevo? Si no tenemos la suerte de ir detrás de
alguien que esté más concentrado que nosotros, esperemos que por lo menos no
nos pase como en la oca, y tengamos que volver a la casilla de salida.
Pero tranquilos, parece ser que después
de y a pesar de todo, los seres más o menos humanos seguimos teniendo la
capacidad de concentrarnos en lo que estamos haciendo aunque sólo sea un exiguo
4% del total del tiempo, en el que nos dedicaríamos en cuerpo y alma a la
práctica natatoria. Así que ya sabéis; el 96% restante andamos divagando por
mundos paralelos. ¿O será que nos gusta aprovechar el tiempo en plan multitarea?
Siempre puede uno ponerse a repasar la lista de los reyes godos, qué se yo, un
largo por Recesvinto, otro por Sisebuto…
Ya sabéis, la próxima vez que
vayáis a la piscina andaos con cuidado. Sabemos
lo que estáis pensando. Jajaja, un saludo ;)
Hola mi nombre es Fernando Gude, y aunque soy Burgalés de nacimiento, actualmente vivo en Granada, y tanto yo en categoria master, como mis hijos en otras categorias, entrenamos en el Club Natación Granada, me ha parecido curioso vuestro articulo de que pensamos mientras nadamos, asi que con vuestro permiso lo voy a retwittear al Cngranada. Un saludo a todos.
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